31/05/2013

Continúan los nuevos planes de desarrollo de zonas piloto en Nansha, y entre Beijing y Hebei.

China sigue adelante con la transformación de varias de sus provincias en zonas piloto, tras el éxito que ha supuesto esta iniciativa en regiones como Hong Kong o Shenzhen. En esta ocasión, las elegidas serán Nansha, en la provincia de Guangdong, y Beijing y la provincia de Hebei.

La Nueva Área de Nansha ocupará 24,52 km. cuadrados y se extenderá por la Isla de Longxue y por la Bahía. Según las informaciones publicadas el pasado lunes 27 de mayo, ya han comenzado las negociaciones pertinentes con el gobierno central del país, que también se verá altamente beneficiado a la hora de realizar acuerdos con la nueva zona de libre comercio.

La transformación de la ciudad en un área “free trade” será también una manera de apoyar a la reforma general de toda la provincia de Guangdong, que comenzó a principios de este año. Si todo sale según lo esperado, el plan se aprobará a finales de este mes o como mucho, durante el siguiente.

Las peculiaridades de la nueva zona en Nansha fueron conocidas en la celebración de un foro los días 13, 14 y 15 de mayo en Hong Kong y en Macao. Allí, el alcalde de Guangdong, explicó cuáles serían las características de esta iniciativa y cómo se llevaría a cabo.

Según las palabras del alcalde, Nansha adquirirá una política propia en lo que se refiere a los tributos e impuestos, a la utilización y trabajo de la tierra y a la modernización y a la innovación tecnológica e industrial. Para hacer esto posible,es necesario que el gobierno central de China apoye esta iniciativa.

Durante este evento, se ha podido conocer la identidad de 17 empresas, tanto públicas, como privadas como del extranjero, que han decidido firmar acuerdos con las autoridades de Nansha. En total, serán 234,8 billones de yuanes los que se invertirán en zona. Las empresas pertenecen a sectores muy variados, entre los que se encuentran el energético, el cultural e incluso el educativo.

Por último, las autoridades de la ciudad han hecho hincapié en que para que el establecimiento de la zona funcione, el gobierno chino ha de continuar con políticas aperturistas en lo que respecta a los intercambios comerciales y de fronteras. De ese modo, se podrán efectuar con mayor eficacia transacciones con otras regiones del país, como por ejemplo Hong Kong y Macao.

La otra zona piloto será planteada como un acurdo económico entre Beijing, capital del país, y su vecina la provincia Hebei. Las autoridades están trabajando en un plan desde el año 2011, para conseguir la construcción de un Área Económica Especial entre ambas regiones. De esa manera, se solucionarían muchos de los problemas demográficos y de vivienda que afectan a la zona entre ambas regiones.

La zona abarcará varias ciudades de Hebei, entre ellas , la capital: Shijiazhuang. Uno de los principales retos será la construcción de diferentes vías de transporte que unan a estas regiones con Beijing, para acelerar los intercambios, como una línea de trenes rápidos y un aeropuerto.

En resumen, la creación de las zonas piloto, constituye una excelente oportunidad para toda China. Si se logran los objetivos marcados, se solucionaran problemas relativos, no solo al comercio, sino también al desarrollo de muchas regiones del país que hasta ahora, no habían tenido esa posibilidad debido a su localización y a otros factores.

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